domingo, 21 de abril de 2013

¿Es ciencia lo que no es medible?

A raíz de una agradable visita a unos amigos en un país de desagradable clima, surgió una conversación con ellos sobre ciencia, pseudociencia, escepticismo y demás. La chica (siempre hay una chica) me preguntó algo que aún no estoy seguro de saber contestar: "Lo que no se puede medir, ¿es ciencia?" Como medida cautelar, le dije que sí, pero aún así sigo sin tenerlo claro. Para contestar correctamente habría que, quizá, concretar más la pregunta. Por ejemplo, habría que especificar si "eso que no se puede medir" no se puede hacer porque aún no tenemos los medios (¿podremos llegar a medir "la intensidad" de un sentimiento, la longitud de un recuerdo?) o bien porque "eso" es no medible.

En primer lugar, habría que definir qué significa medible. Empecemos por lo fácil y definamos medir como "el hecho de cuantificar o de obtener un número asociado a un evento o sistema físico". Es decir, que algo sería medible si podemos expresarlo con un número dentro de una escala.

Pues bien, este detalle de medible o no encierra otro curioso problema, llamémoslo, filosófico: ¿es medible todo lo que existe en el Universo o hay entidades que no son medibles? No es una pregunta tonta, como podría parecer en un primer momento, y no creo que haya una respuesta más allá de una convicción o creencia personal.

Si consideramos que sí, que todo es medible, esto implica dos cosas: que en algún momento llegaremos a medirlo (si no se destruye la civilización y el conocimiento sigue avanzando, que no es poco) y que somos máquinas. Nuestros sentimientos serán también medibles en algún sentido (o en varios) y podrían llegar a interpretarse como reacciones ante eventos. La clave sería que, al ser medibles, podríamos llegar a simularlos en un ordenador (no hay más que ver qué valores toma la tristeza, por ejemplo, cuando recibe el estímulo "rechazo amoroso" y luego realizar la simulación) llegando a la cuestión: "¿Podríamos decir que el ordenador siente tristeza, si hacemos esta simulación? ¿Bastaría hacer lo anterior para considerar que "algo", como un ordenador, siente? Obviamente esto es un debate que podría dar para un libro. De hecho, uno como el que estoy re-leyendo, "La nueva mente del emperador" de Roger Penrose. Trata sobre inteligencia artificial y también sobre preguntas como al anterior. Recomendable si alguien se encuentra especialmente valiente, ya que Penrose se caracteriza por hacer libros de "divulgación para científicos" por decirlo de forma sencilla, y suelen ser duros de leer (aunque muy interesantes).

Siguiendo con la asunción de que todo fuese medible, lo segundo que implica es, en este caso, la respuesta a la pregunta que ha dado lugar a este post: "¿Es ciencia lo que no es medible?". Esa respuesta será "No". Ya que entendemos la ciencia como la descripción (más aproximada) que conocemos del Universo y todo lo que contiene, si consideramos que "todo" es medible, la respuesta debe ser que lo que no lo es, no sería ciencia, sino brujería, pseudociencia, invención o lo que queráis. Pero no me despellejéis todavía. Veamos que implicaría que consideremos otra cosa.

Si, por el contrario, consideramos que no, que no todo lo que existe ni lo que pasa en el Universo es medible, habría que ver qué cosas no serían medibles y si son ciencia o no. En eso estuve entretenido gran parte del camino de vuelta, así como en escribir la entrada sobre escepticismo que espero publicar pronto. El caso es que si existiesen procesos, objetos, eventos o sucesos sin más que no fuesen medibles o cuantificables, tendríamos que replantearnos completamente el universo. Si existiese por ejemplo la magia, en el sentido en que hubiese gente que pudiese lanzar hechizos, ¿qué serían esos hechizos? es decir, ¿cómo afectarían al mundo, a los átomos? Si alguien te lanzase un hechizo de fuego ¿cuál sería el proceso por el que se produjese una llamarada? ¿Sería un fuego como el normal, átomos con mucha energía que producen reacciones de combustión mediante aumento de temperatura? ¿o cómo lo haría?

Yo veo un problema a eso de que hubiese eventos no medibles. Las leyes del comportamiento atómico, las leyes químicas y, en general, todas las leyes que rigen el comportamiento de la materia (y de la física) son cuantificables, por lo que cuando decimos que son afectadas por algo, deben serlo en una cantidad determinada. Por ejemplo, decimos que mi "magia" particular afecta a la temperatura de una habitación haciendo que aumente. Eso implica que de alguna manera afecto el movimiento de los átomos y moléculas del aire de forma que aumento la temperatura. Pero para hacer eso, tengo que considerar que mi "magia" sí está cuantificada ya que "aumenta la temperatura x grados centígrados", de forma que resultaría medible.

Resumiendo, creo que lo único que, hoy en día, podría no ser medible, podrían ser las emociones y comportamientos humanos, porque el resto de procesos que se me ocurren, serían medibles de alguna forma, aunque fuese aún desconocida. También puede ser la falta de ideas ocurrentes por mi parte...

El caso es que, para terminar esta reflexión sin conclusión clara, pienso que el creer (ya que, de momento, no sabemos suficiente sobre esta cuestión y yo menos, que no soy neurólogo ni nada parecido) que los sentimientos sean medibles o no ya enlaza con creer que el YO, la persona que "habita un cuerpo", sea sólo un conjunto de procesos en el cerebro o bien, creer que no, que hay algo más: alma, propiedades emergentes... Lo que sea que signifique ese "algo más".

En fin, hasta aquí mi pildorita de demencia de hoy. Saludos!