Se acabó. Ya hce el último exámen. Después de un mes y medio encerrado en la biblioteca, terminé. Mucho tiempo sin saber apenas del mundo: salvo retazos, como la huelga de transportes y los rumores y ecos de la crisis, cosas que pasan en el mundo y que apenas me entero.
Acabo los exámenes después de mucho tiempo sin ver ni hablar a G de Galleta. No sé dónde está. Estudió todo lo que tenía yo para estudiar, se lo aprendió todo y lo absorbió como una esponja (no como yo, me temo) y desapareció. Aún le estoy esperando, aunque el martes me voy a trabajar fuera y luego apenas tendré dos días y reengancharé con Londres... Otra vez se para todo y tengo que dejar todo de lado para centrarme en algo. LLámalo Exámenes, llámalo Campamento o Inglés en Londres. El caso es que al final siempre estamos dejando de lado lo que quiero. Los problemas, para más adelante. Así parece que no existen, que es porque no tenemos tiempo para nada, y que se solucionará todo cuando acabe. Pero luego resulta que no.
Así que, de nuevo, a posponer cosas, dejando de lado pensar en lo que te preocupa... Somos hormiguitas que no paran de trabajar, buscando un fin que nunca llega. Así que nada, a ver si veo a G este verano...